Nuestro vivero de plantas autóctonas

Presentación

Disponer de un vivero propio fue desde el principio uno de nuestros objetivos, pues muchas de nuestras actividades y proyectos implican repoblar con plantas autóctonas, y dependíamos para conseguirlas de viveros comerciales en los que conocer el origen y procedencia exacta de las plantas no siempre es tarea sencilla.

Gracias a un convenio firmado con CECOUAL (Centro de Colecciones de la Universidad de Almería), la Universidad de Almería nos cedió en 2020 un espacio y un viejo invernadero abandonado, que no con poco trabajo, logramos poner en funcionamiento, limpiando y reparando el invernadero y acondicionando una zona contigua para mantener las plantas en exterior.

Actualmente disponemos del invernadero y del espacio exterior junto a éste donde hemos instalado un sombreado para proteger la plantas del sol, y estamos en negociaciones para conseguir un espacio más grande.

Objetivos

El objetivo principal del vivero es disponer de una producción propia de plantas autóctonas para cubrir las necesidades de las actividades de repoblación que realiza nuestra entidad.

Actualmente el vivero está centrado fundamentalmente en producir plantas para nuestro proyecto "Filabres, el renacer del bosque frontera", cuyo objetivo es la naturalización de los pinares de repoblación plantados en los años 60 y 70 del siglo pasado en la Sierra de los Filabres.

Metodología

La metodología varía dependiendo de la especie, pero a modo general consiste en:

1. Recolección de semillas

El primer paso para la siembra de plantas en el vivero es la recogida previa de semillas.

La maduración de las semillas de las especies que hasta la fecha estamos recogiendo en Sierra de los Filabres va desde finales de junio, período en el que se recogen semillas de diferentes labiadas aromáticas, hasta bien entrado noviembre con la recogida de bellotas.

Hemos seleccionado las especies en función de su escasez actual en la sierra de Filabres. Generalmente, debido precisamente a su limitada presencia en la sierra, para recoger estas semillas hay que acceder a lugares en muchas ocasiones recónditos y de difícil acceso, madrugando bastante para recoger las especies de maduración estival con el fin de evitar los rigores de la canícula veraniega.

2. Conservación de las semillas

Tras la recolección de las semillas, se procede a su limpieza y a su posterior secado para evitar que se enmohezcan. A continuación, se almacenan en bolsitas que se guardan en cajas. Para su conservación, se guardan en sitios frescos como una nevera o un sótano. El tiempo que las semillas permanecen viables depende de la especie y va de algunos meses a algunos años.

3. Preparación de las semillas para la siembra

A la hora de sembrar hay que determinar el método adecuado para su siembra pues dependiendo del tipo de semilla se ha de optar por un método u otro:

• Hidratación: Las semillas se ponen a remojo en agua durante 24 horas para reactivarlas y romper su estado de latencia.
• Escarificación: El objetivo es debilitar su capa exterior para facilitar su germinación, bien mediante escarificación mecánica (limar o desgastar un poco la punta) o mediante escarificación química (tratamiento de las semillas con diferentes ácidos). 
• Estratificación: Se trata de reproducir unas condiciones similares al invierno. Es decir, se meten las semillas en un recipiente con papel o turba humedecidos en la nevera durante un periodo de 2-4 meses.
• Escaldado: Las semillas se sumergen en agua a punto de ebullición y se dejan enfriar en el agua hasta alcanzar la temperatura ambiente durante 24 horas.

4. Siembra

Una vez sometidas las semillas a uno de estos tratamientos previos, se disponen en bandejas de siembra de alveolos forestales con un sustrato formado por turba, perlita y fibra de coco, y se cubren con una capa de vermiculita para que se mantengan mejor las condiciones de humedad.

Las bandejas se colocan en el invernadero donde las condiciones de humedad y temperatura facilitan su germinación. 

5. Aclimatación

Una vez que alcanzan el tamaño adecuado, se sacan a la zona de sombreado habilitada en la zona exterior del invernadero para que las plantas se vayan adaptando a las condiciones climáticas a las que se van a enfrentar.

En el caso de las especies serranas, transcurridos unos días, son trasladadas a Las Menas, al espacio cedido para tal fin por la Delegación de Medio Ambiente de Almería, donde las plantas se adaptan a las condiciones climáticas de la Sierra de los Filabres como paso previo a su plantado definitivo en el monte.

Resultados

Actualmente, en el vivero estamos produciendo las siguientes especies, todas a partir de semillas locales: