- Escrito por: Javier Gállego
A raíz de la publicación de nuestro artículo sobre la población de Indotyphlops braminus que sobrevive en Aguadulce (Almería) en el que decíamos que se trataba de la única población conocida de esta especie en la Península Ibérica (y de hecho en Europa continental), han sido numerosas las personas que se han puesto en contacto con nosotros a través de los comentarios en las redes sociales, mensajes privados y correos electrónicos, declarando haber visto estas "culebrillas ciegas" en diferentes localidades de la geografía española.
Quizá deberiamos haber aclarado en el artículo, para evitar confusiones, que en España existe un reptil sin patas y que vive bajo tierra, y que recibe el nombre de "culebrilla ciega", el cual a pesar de su nombre, no es una culebra, sino más bien un lagarto sin patas. Se trata de un anfisbénido del género Blanus, representado en la Península Ibérica por dos especies indistinguibles por su aspecto externo, Blanus cinereus y Blanus mariae.
Nuestra "culebrilla ciega" nativa Blanus es una especie común en la mitad sur de España, y es lo que los lectores que nos han escrito habian visto en realidad.
- Escrito por: Rubén Tarifa
El pasado mes de diciembre realizamos la primera salida para censar aves nocturnas, correspondiente al Programa NOCTUA 2016.
Justo después del atardecer visitamos los 5 puntos de muestreo presentes en la cuadrícula WF3070. El primer punto de escucha localizado en Aguadulce, nos dio una fantástica sorpresa. Un pequeño grupo de alcaravanes comunes (Burhinus oedicnemus) de tres individuos fue detectado en una parcela abandonada situada en el centro de Aguadulce. Este dato es más que relevante para poder afirmar que los parches de terreno que aún quedan sin edificar son vitales para muchas especies. Son usados tanto de manera esporádica como durante su periodo de cría.
- Escrito por: SERBAL
Entre 1956 y 1958 se plantaron en Almería casi 3 millones de pitas en 1280 hectáreas, de lo que es hoy el Parque Natural de Cabo de Gata Nijar y el Toyo. El objetivo era obtener fibras de estas especies y poner así en valor estas improductivas tierras. Sin embargo estos cultivos no tuvieron el éxito esperado y fueron abandonados.
Casi 60 años después las pitas son ya parte de nuestro paisaje. A pesar de su carácter exótico, muchos almerienses las consideran autóctotonas y un símbolo de nuestra provincia. Algo único.
Desde hace unos meses, se ha generado una gran polémica en Almería por la intención de la Junta de Andalucía de erradicar parte de estas pitas. El objetivo es restaurar el hábitat original, el azufaifar, a traves de un proyecto LIFE financiado por la UE.